Mañana mi territorio 08 Reducir los residuos en mi territorio
Reducción de desechos
noviembre 2019
Agence pour l’Environnement et la Maîtrise de l’Energie (ADEME)
Las 20 fichas de la colección « demain MON TERRITOIRE » se han concebido para dar a los candidatos y a los funcionarios elegidos claves prácticas para actuar, para abrir el campo de posibilidades basadas en las experiencias de otros funcionarios elegidos, desde pequeñas ciudades a conurbaciones, grandes zonas urbanas o zonas escasamente pobladas. En los cuatro rincones de Francia, tanto en la Francia metropolitana como en los territorios de ultramar, muchos de ellos están tomando medidas, junto con los actores de sus territorios, para preparar el futuro mediante acciones para mitigar el cambio climático y adaptarse a sus efectos. Con su conocimiento y presencia en todo el país, la ADEME los apoya con sus herramientas, actividades y ayuda financiera.
¿Por qué es importante reducir el desperdicio fomentando una mayor sobriedad en la forma en que consumimos?
Nuestra actual forma de vida está desbordando los cubos de basura. Los desechos del hogar, la oficina, el comercio, los parques y jardines son un desperdicio de recursos. Su tratamiento es costoso (recogida, reciclaje, incineración, entierro…). Sobre todo, deben ser evitados. Las comunidades y sus habitantes deben cambiar su comportamiento, consumiendo de manera más responsable, a fin de ahorrar materias primas y reducir el impacto ambiental de los productos a lo largo de su ciclo de vida (fabricación, transporte, eliminación). La lucha contra el despilfarro de recursos y la producción de desechos es también una ganancia financiera para el territorio y, en última instancia, para el poder adquisitivo de sus habitantes.
¿Cómo lo haces?
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Estamos repensando el territorio al entrar en la era de la « economía circular ». Estamos rompiendo con los viejos hábitos de « hacer, consumir, tirar ». La reducción de los residuos en la fuente se convierte en una prioridad. Con la ayuda de todos.
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Estamos haciendo la separación de residuos más eficiente. Mejoramos el sistema de recolección ofreciendo recolecciones separadas… Instalamos estaciones locales de compostaje.
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Mejoramos la limpieza de las calles movilizando a los habitantes y luchamos contra los vertidos ilegales.
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Un instrumento que ha demostrado su utilidad para alentar a los residentes a reducir el peso de sus contenedores es el precio de incentivo, en el que la factura se ajusta según la cantidad retirada. Y se está pensando en soluciones apropiadas para el desperdicio de los comerciantes y artesanos.
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Nos comunicamos con los ciudadanos para fomentar acciones sencillas que permitan tirar menos, como comprar más productos a granel. Se les invita a colaborar en la forma de consumir: reparar un artículo roto, regalar su ropa, pedir prestado un escurridor o una herramienta del vecindario. Como un bono, crea lazos sociales.
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Apoyamos el establecimiento de centros de reciclaje y recursos. Estos lugares dan una segunda vida a los productos y todos pueden equiparse allí a un costo menor.
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Se decreta la lucha contra el desperdicio de alimentos. El ejemplo se da en los comedores escolares y en los restaurantes comunitarios, por ejemplo, introduciendo porciones más adaptadas al apetito.