Alianzas para la gobernanza alimentaria en Valencia

Estrategia participativa en el marco de las políticas alimentarias

January 2019

Fondation Daniel et Nina Carasso (FDNC)

¿Hacia una Europa de sistemas alimentarios territoriales?

Este estudio se extrae del análisis de veintidós proyectos franceses y españoles relacionados con los nuevos modelos alimentarios, que ponen de manifiesto diferentes retos.

En España se está construyendo la gobernanza, mientras que los sistemas alimentarios franceses buscan soluciones para cambiar de escala. Pero en ambos países, la accesibilidad sigue siendo el eslabón débil. En Valencia, las alianzas entre los actores sociales, políticos y económicos valencianos han resultado necesarias para expresar las demandas de saneamiento del sistema alimentario y diseñar el camino de transición hacia su sostenibilidad. Para lograr este objetivo, existe un consenso sobre la participación conjunta en la definición de los retos del sistema alimentario.

Valencia, España

Valencia cuenta con un territorio periurbano productivo para la agricultura, la pesca y la ganadería. En los últimos veinte años se ha desarrollado un importante movimiento en defensa de la llanura hortícola de la región. La Horta de Valencia, un paisaje de canales de riego, presas y pequeños embalses, proporciona un marco para los alimentos locales de calidad.

PAIPATA

El año 2015 marca la adhesión de la ciudad de Valencia al Pacto de Política Alimentaria de Milán. Este compromiso ha llevado a la aplicación y despliegue de una política alimentaria urbana global. Se trata de construir procesos de transición hacia un sistema alimentario más justo, sostenible y resistente. El Ayuntamiento y la Concejalía de Agricultura comenzaron diseñando un plan de acción integral para la promoción del territorio y la actividad agraria municipal (PAIPATA).

El Plan de Actuación Integral para el Fomento de la Actividad Agraria Territorial y Municipal (PAIPATA) es el primer instrumento de la política agraria valenciana, posteriormente enriquecido a través de un proceso participativo. El Ayuntamiento prevé varios ámbitos de actuación: transmisión generacional, gobernanza del sistema alimentario municipal, mejora de la rentabilidad empresarial, fomento de la actividad agroalimentaria responsable, ordenación del territorio, infraestructuras, patrimonio, servicios y pesca. El grupo impulsor se encarga de promover el proyecto y su dinámica. A partir de su composición, representativa de la sociedad civil, multiplica las reuniones y peticiones de los diferentes actores de la cadena alimentaria, en particular las administraciones territoriales, el sector productivo y la sociedad civil.

Mantener la acción

A continuación, establecieron un marco estratégico más amplio y participativo para garantizar que este proceso de transición pudiera resistir los efectos del cambio político. El desarrollo de la política alimentaria municipal cuenta con el apoyo del ayuntamiento a través de su recién creada concejalía de agricultura, huerta y pueblos de Valencia. Se encarga de diseñar y ejecutar la estrategia de promoción de la actividad agraria y de los espacios dedicados a la agricultura. La dinámica del proyecto se apoya en otros actores asociados: Cerai, VSF-Justicia Alimentaria, la Cátedra Tierra Ciudadana y Mundubat. Todos ellos forman el grupo motor cuya labor es coordinar la estrategia principal del proyecto y sus líneas de actuación: animación del consejo alimentario, estudios de mercado y circuitos cortos, estudios sobre los procedimientos de contratación pública, incubadoras de empresas agroalimentarias, animación del banco municipal de tierras y cobertura mediática de los avances. El proyecto se basa en la participación y colaboración de los actores que influyen en el sistema agroalimentario: el mercado de interés nacional Mercavalència, las asociaciones, los partidos políticos y las administraciones provinciales y regionales.

Establecer la gobernanza alimentaria

Se facilitan recursos para animar una amplia participación y formar un consejo alimentario (Calm): un espacio estable de participación que invita a dialogar a personas sensibilizadas, actores del sector convencional y diferentes partidos políticos. Se crean talleres, reuniones y jornadas de intercambio para elaborar una carta de principios y una propuesta de reglamento para la Calma: el primer paso para crear alianzas es aclarar las reglas. Cada grupo de trabajo presenta propuestas concretas para alimentar el proceso de participación, que también promueve la coordinación intermunicipal.

Sources