Entender la transformación de las relaciones entre las entidades territoriales, el Estado y las instancias supranacionales

Las relaciones entre las entidades territoriales y el Estado siguen estando principalmente regidas por un reparto estricto de las competencias y de los medios entre los distintos niveles de entidad. Aunque la descentralización de los poderes, predicada por las instancias supranacionales, ha fortalecido en muchos países el papel de las administraciones locales, la realidad de los medios financieros, legales, reglamentarios y humanos de los que disponen los territorios locales sigue siendo muy heterogénea y el impacto efectivo de una descentralización, que está además en evolución, es objeto de debate en todas partes del mundo.

Hay una cuestión doble que se plantea en el centro de ese reparto: la de la escala pertinente de la toma de decisiones y la gestión de las políticas públicas y la de la coordinación entre las distintas escalas. Esto da lugar a un recorte territorial y funcional que se ensambla y se articula de manera más o menos compleja según los países. La acción de las entidades se inscribe asimismo dentro de dinámicas globales, que se traducen actualmente en una competencia entre ciudades y, al mismo tiempo, un fortalecimiento del diálogo internacional entre ciudades y entre las ciudades y las instancias supranacionales. Dicho diálogo es señal de su voluntad y capacidad para posicionarse más allá de las fronteras administrativas, aportando un nuevo elemento a las relaciones entre las colectividades y el Estado.


Los textos reunidos bajo este tema de la transición tienen por objetivo aportar elementos de respuesta a las siguientes preguntas:

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