El atlas relacional como herramienta pedagógica y colaborativa
El atlas relacional se utiliza aquí como parte de un enfoque multi-actores. Se trata de movilizar la biblioteca viviente que es el atlas relacional, y su potencial en cuanto a la ampliación de los puntos de vista sobre un problema para facilitar la entrada en la inteligibilidad de todos los actores.
Siguiendo el ejemplo del enfoque seguido en solitario por el internauta, frente a la pantalla de su ordenador, el atlas relacional sirve para conducir este enfoque en grupo, a menudo como punto de partida de un proyecto territorial: aprehender los diferentes enfoques posibles del problema, conocer las experiencias ya referenciadas, construir el propio camino de acción.
Este enfoque se lleva a cabo directamente desde el sitio atlas relacional explorando los posibles caminos basados en las cuestiones del grupo.
Así, al mostrar los conjuntos de relaciones, el atlas permite abrir el debate sobre un tema o asunto determinado, mirarlo desde un ángulo diferente al habitual, tener acceso a una retroalimentación que complemente la propia acción.
El uso del atlas permite identificar los puntos de atención, los posibles ángulos de enfoque, identificar las experiencias que pueden ser movilizadas, para apoyar un enfoque. El objetivo en este caso es representar la realidad en su complejidad, en la diversidad de sus aspectos y hacer algo de ella, para alimentarse eficazmente de la experiencia de otros, pero sobre todo para salir de un enfoque de silo.
Tomemos un ejemplo. En el marco de un proyecto sobre la democracia participativa, las asociaciones de desarrollo local están realizando una búsqueda en el motor de búsqueda del atlas. Varios descriptores surgen de la investigación. Los usuarios optan por empezar con el más sencillo: "democracia participativa" para obtener una visión amplia de este tema.
En el contexto de nuestro ejemplo, el descriptor de nivel 1 "sistema democrático" es de particular interés para los usuarios porque describe el marco operativo en el que operan las instituciones que organizan el territorio. Describe el modelo que rige el espacio político en el que opera la sociedad.
A partir de este descriptor constitutivo de la matriz del atlas, se construyen relaciones y se desarrollan nuevos descriptores más precisos. Este es el caso de "democracia participativa". Elemento de un sistema democrático, la democracia participativa puede abordarse introduciendo los actores interesados (habitantes, ciudadanos, etc.), las tipologías de las prácticas (democracia local, formal y sustancial), las dinámicas creadas en el territorio (demanda social de participación, movilización ciudadana), las herramientas/medios movilizables para darle vida (desarrollo del poder de acción de los ciudadanos, control de la acción pública, panel de ciudadanos, conferencias ciudadanas, etc.).
Esta navegación permite dos cosas:
- para ir a un nivel cada vez más fino. Por ejemplo, encontrar experiencias relativas a los enfoques y métodos de la democracia participativa, apoyados por el desarrollo del poder de acción de los ciudadanos y por las iniciativas ciudadanas, que permitan observar sobre el terreno la contribución de esas iniciativas a la mejora de los enfoques de la democracia participativa.
- para subir a un nivel uno, a otra gran categoría. Por ejemplo, la democracia participativa tiene que ver con las personas. Estos habitantes son actores en el tejido urbano, y más generalmente "actores en la organización del espacio y el desarrollo".
Así, el atlas proporciona acceso a recursos como la capitalización de experiencias que, a diferencia de las agregaciones convencionales, se confrontan/cruzan entre sí. Por ejemplo, hasta la fecha (20/02/2018) se han indexado 41 documentos con el descriptor "democracia participativa", lo que corresponde al mayor número de recursos que se pueden movilizar, comparar y cruzar. El hecho de ver aparecer otros recursos en los descriptores vecinos permite entonces ampliar los cruces entre los recursos, para completarlos con enfoques diferentes.