Ventana de la verdad sobre la escuela
Corentin Desmichelle, noviembre 2019
Topophile - l’ami-e des lieux es la revista de los espacios felices. Cuestiona ecológicamente nuestra relación con el mundo, con los espacios y lugares, con los entornos construidos y naturales, cuestiona nuestras formas de construir, habitar y pensar para permanecer plena y justamente en la Tierra. En este artículo, Corentin Desmichelle presenta la ampliación de la escuela primaria de Bourgueil, en Indre et Loire: una realización arquitectónica contemporánea en un tejido urbano antiguo, ¡pero no sólo!
Equilibrio: continuidad y ruptura
El centro de la ciudad de Bourgueil está marcado por un tejido urbano antiguo. Esta zona se caracteriza por la presencia de edificios de gran calidad patrimonial, regidos por estrictas formas de implantación. El edificio debía construirse a lo largo de la calle. Hemos optado por alargarlo al máximo para reducir la anchura y crear una fachada de edificio que enmarque el patio de la escuela.
Sin embargo, en derogación de las normas del PLU, la implantación se ha desplazado 1,5 m del límite de la parcela para introducir una franja vegetal entre el espacio público y los muros de la escuela. Este espacio está plantado con arbustos frutales en espaldera y plantas perennes comestibles que, a la manera de la asociación inglesa de Todmorden « les incroyables comestibles », fomentan una convivencia pública en el umbral de la escuela.
La especificidad técnica del proyecto proviene de la composición de la envoltura. Los muros de la escuela están construidos con armazón de madera y aislamiento de paja, revocados por fuera en tierra cruda con acabado de cal. En el interior, las paredes están cerradas con paneles de refuerzo y placas de yeso y celulosa, que soportan la pintura. Las habitaciones están ventiladas con un sistema de ventilación de doble flujo de alta eficiencia. El rendimiento térmico del edificio cumple los objetivos Passivhaus BaSE (máx. 30 kWh/m2.año).
La arquitectura establece una continuidad formal con la tradición (paredes enlucidas en los mismos tonos, tejados de pizarra, carpintería en los colores de la ciudad) y una ruptura constructiva en los materiales elegidos y su aplicación (madera/paja/tierra frente a hormigón o piedra).
La verdad: aprender y dar testimonio
La obra fue una oportunidad para difundir los conocimientos técnicos del enlucido de tierra sobre paja. Durante varias jornadas organizadas por el Parque Natural, empresas locales de albañilería participaron en la aplicación del revoque de tierra cruda bajo la dirección del artesano (Claytech, Noé Solsona) encargado del proyecto.
Cada aula tiene una « ventana de la verdad » (una ventana de cristal en la pared que permite ver el aislamiento de paja). Así, todos pueden descubrir la naturaleza de las paredes de su escuela. Es interesante observar que, a pesar de su inusual técnica de construcción, el proyecto no es más caro que un edificio convencional. Por otro lado, será mucho más económico en su funcionamiento. De hecho, nunca necesitará refrigeración artificial en verano y sus necesidades de calefacción en invierno son extremadamente reducidas por la calidad de su envoltura de paja.
La arquitectura no es una máquina viva, sino un organismo vivo.
Este caso ilustra la superioridad de los sistemas de construcción sencillos que utilizan materiales primarios (piedra, tierra, madera, paja, etc.) para proporcionar confort. En comparación, los resultados de los complejos métodos de construcción y los materiales industriales son decepcionantes, caros, contaminantes, ruidosos y antiestéticos. La arquitectura no es una máquina para vivir, sino un organismo para vivir.