Estrasburgo (FR) - De funcionarios públicos a empresarios institucionales
2019
El municipio de Estrasburgo lleva años trabajando para establecerse como intermediario de la innovación social. Como parte de la red URBACT BoostInno, la ciudad descubrió herramientas que le ayudaron a construir una plataforma unificada para apoyar a las empresas de nueva creación en los sectores público y privado.
Para descargar: urbact-citystories-strasbourg.pdf (1,4 MiB)
Desde los planes de uso compartido de automóviles hasta las iniciativas de software de código abierto, Estrasburgo se ha establecido durante la última década como un semillero de experimentación social. No se trata sólo de nuevos productos y servicios, sino de nuevas formas de hacer las cosas. En el centro de todo ello ha estado la adopción por parte del municipio de metodologías de co-construcción, diseñadas para salvar la división entre los sectores público y privado. La ciudad incluso tiene un Consejo de Solidaridad Social dedicado a mediar en este proceso. Fundado en 2010, este órgano, que reúne a interesados del municipio, empresas y organizaciones no gubernamentales, es un intento singular de sustituir la política pública de gestión por un modelo más colaborativo. « Llevamos mucho tiempo trabajando en esto y hemos logrado mucho », dice Sandra Guilmin, Jefa de Economía Social y Solidaria del municipio, « pero si bien la cocreación es fuerte, todavía tenemos que trabajar en el fomento de una cultura de participación pública, que lamentablemente no está tan avanzada en Francia ». A medida que la ciudad trabaja para integrar las medidas para la eliminación de los silos en su estrategia de desarrollo económico, ‘Strasbourg éco 2030’, también está buscando nuevas formas de potenciar a los ciudadanos en este proceso. Por lo tanto, desde el principio, la red URBACT BoostInno fue concebida como parte de este viaje más amplio, un experimento para desbloquear la energía económica latente de la ciudad.
Estimular, no gestionar, la participación
A pesar de su punto de partida relativamente avanzado, los practicantes de Estrasburgo aprendieron mucho de las ciudades asociadas. « Nuestro principal beneficio vino de la red internacional », reflexiona la Sra. Guilmin. « Trabajar juntos nos dio muchos ejemplos no sólo de cómo las ciudades son diferentes sino también de cómo somos similares ». Estrasburgo se sorprendió especialmente, por ejemplo, al comprobar que el municipio de Turín (IT) también estaba trabajando en un proyecto para integrar a los funcionarios en el ecosistema empresarial de su ciudad. Ahora, gracias a BoostInno, las dos ciudades intercambian reflexiones sobre cómo evitar el exceso de control sobre el público. Ciudades como Milán (IT), por su parte, aportaron novedades. Estrasburgo quedó tan impresionada por su campaña de crowdfunding cívico - en la que el municipio cofinanció 400 000 euros para apoyar iniciativas sociales - que incluyeron un objetivo equivalente a largo plazo en el Plan de Acción Integrado que definieron como parte de su trabajo con BoostInno. Esto fue aprobado por las autoridades de la ciudad y la Eurométropole en el otoño de 2018. Más allá de las nuevas relaciones, la ciudad también descubrió herramientas útiles gracias a URBACT. Una de las más exitosas fue Kumu, una plataforma de visualización de datos que se había utilizado en las reuniones transnacionales para comparar y contrastar los desafíos de las ciudades asociadas. Estrasburgo hizo uso de su capacidad para trazar sinergias a través de los espacios físicos y mentales con el fin de visualizar las relaciones entre las partes interesadas de una nueva manera. Como resultado, el Grupo Local URBACT de la ciudad, formado por empresarios y activistas locales, así como por funcionarios municipales, pudo identificar cómo las actividades de un grupo de reflexión llamado ‘Appuiculteurs’, por ejemplo, podían vincularse más eficazmente con ‘KaléidosCOOP’, un espacio de colaboración creativa, empresarial y comunitaria que se inaugurará en 2020. Mediante el uso de dibujos y caricaturas profesionales, el Grupo Local URBACT también trabajó para comunicar las conclusiones de estas reuniones a un público más amplio.
Vincular las economías circulares y solidarias
Sin embargo, el éxito local más tangible de BoostInno fue el apoyo que prestó durante la formación de una plataforma de comunicación dedicada a las nuevas empresas de gran impacto social, llamada « Start-up des Territoires ». El objetivo de esta iniciativa, que ya estaba prevista para 2015, era vincular los principios de la economía circular con los de la economía social y solidaria. La iniciativa también marcó un cambio en el paradigma de gobernanza de la ciudad que se había establecido con el Consejo de Solidaridad Social: dentro de la plataforma, los proyectos públicos se consideraban parte del mismo ecosistema innovador que los privados. Siguiendo las directrices detalladas del Plan de Acción Integrado, Start-up des Territoires pudo crecer hasta atraer la participación de más de 1.000 personas. Hasta el otoño de 2018 la plataforma ha dado lugar a 15 proyectos en diversos ámbitos, desde la agricultura hasta el turismo. Como resultado se crearán más de 200 puestos de trabajo. « Estrasburgo no sólo compartió y aprendió, sino que creó activamente nuevas herramientas », afirma Peter Wolkowinski, experto principal de BoostInno. « Este fue uno de los mayores éxitos de la red ». Si al principio del proyecto el Grupo Local URBACT se había preocupado tanto por comunicarse claramente con los no especialistas, al final también se interesó en proporcionar un legado a los profesionales de otras ciudades. Más allá de los mapas, los cómics y los diagramas, la ciudad también elaboró un manual técnico sobre la cocreación, que explica la teoría y la práctica de la intermediación. El proceso de elaboración de éste brindó una útil oportunidad para que el municipio evaluara su participación en BoostInno. Su positiva acogida por parte del público también supuso un valioso reconocimiento a los años de trabajo en este nuevo y arriesgado campo.